La conflictividad laboral se redujo en 2008 pese a la crisis
La crisis económica no ha caldeado de momento la conflictividad laboral en Castilla y León, donde el año pasado se contabilizaron 25 huelgas (23 provinciales y dos regionales), frente a las 27 de 2007. Una situación contraria a la registrada en el conjunto nacional, donde se convocaron 1.019 huelgas, 167 más que el año anterior, con un crecimiento porcentual próximo al 20 por ciento, según un informe de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE).
El estudio, recogido por Ical, constata que el número de horas perdidas por esas movilizaciones en la Comunidad, ascendió a 206.800, un 6,6 por ciento menos que el año anterior. Estas protestas afectaron a empresas y sectores con un total de 10.858 trabajadores censados, de los que 2.818 resultaron directamente implicados, 602 más que en 2007, con una subida del 27,1 por ciento.
Fuentes de la Confederación de Organizaciones Empresariales de Castilla y León (Cecale), explicaron, en declaraciones a Ical, que el descenso en la conflictividad laboral registrado en 2008 «es bueno» en un contexto de crisis, y valoraron el dato «muy positivamente» ente el incremento del desempleo. Al respecto, incidieron en que «los trabajadores se han dado cuenta de que el problema es de todos».
Asimismo, destacaron el comportamiento inverso de la Comunidad respecto al conjunto nacional, algo que achacaron al «avanzado» Diálogo Social de la Comunidad, que refleja un «grado de entendimiento importante» entre los agentes económicos y sociales, así como con la Administración.
A pesar de esta situación, desde la patronal regional auguraron un repunte de la conflictividad laboral en 2009, a medida que avance la crisis, aunque se mostraron esperanzados de que «no crezca demasiado».
Mientras, el secretario de Acción Sindical de UGT en Castilla y León, Modesto Chantre, indicó que las cifras similares de huelgas registradas en 2007 y 2008 son un claro reflejo del índice de actividad de la Comunidad que «es plano». Sin embargo, aclaró que, al igual que los problemas han llegado más tarde a la Comunidad por su estructura productiva, la conflictividad «no ha tocado fondo» y se podría disparar cuando las prestaciones de los trabajadores se vayan acabando y los expedientes de regulación de empleo temporales, se conviertan en suspensivos.
La crisis económica no ha caldeado de momento la conflictividad laboral en Castilla y León, donde el año pasado se contabilizaron 25 huelgas (23 provinciales y dos regionales), frente a las 27 de 2007. Una situación contraria a la registrada en el conjunto nacional, donde se convocaron 1.019 huelgas, 167 más que el año anterior, con un crecimiento porcentual próximo al 20 por ciento, según un informe de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE).
El estudio, recogido por Ical, constata que el número de horas perdidas por esas movilizaciones en la Comunidad, ascendió a 206.800, un 6,6 por ciento menos que el año anterior. Estas protestas afectaron a empresas y sectores con un total de 10.858 trabajadores censados, de los que 2.818 resultaron directamente implicados, 602 más que en 2007, con una subida del 27,1 por ciento.
Fuentes de la Confederación de Organizaciones Empresariales de Castilla y León (Cecale), explicaron, en declaraciones a Ical, que el descenso en la conflictividad laboral registrado en 2008 «es bueno» en un contexto de crisis, y valoraron el dato «muy positivamente» ente el incremento del desempleo. Al respecto, incidieron en que «los trabajadores se han dado cuenta de que el problema es de todos».
Asimismo, destacaron el comportamiento inverso de la Comunidad respecto al conjunto nacional, algo que achacaron al «avanzado» Diálogo Social de la Comunidad, que refleja un «grado de entendimiento importante» entre los agentes económicos y sociales, así como con la Administración.
A pesar de esta situación, desde la patronal regional auguraron un repunte de la conflictividad laboral en 2009, a medida que avance la crisis, aunque se mostraron esperanzados de que «no crezca demasiado».
Mientras, el secretario de Acción Sindical de UGT en Castilla y León, Modesto Chantre, indicó que las cifras similares de huelgas registradas en 2007 y 2008 son un claro reflejo del índice de actividad de la Comunidad que «es plano». Sin embargo, aclaró que, al igual que los problemas han llegado más tarde a la Comunidad por su estructura productiva, la conflictividad «no ha tocado fondo» y se podría disparar cuando las prestaciones de los trabajadores se vayan acabando y los expedientes de regulación de empleo temporales, se conviertan en suspensivos.
Hemos creído oportuno colgar este artículo, ya que trata directamente un tema laboral relacionado con la crisis, en este caso en Castilla y León, donde se valora de forma muy positiva la reducción de la conflictividad laboral en 2008, pero donde el secretario de Acción Sindical de UGT en Castilla y León y la patronal regional auguran malos tiempos en 2009 en lo que a dicha conflictividad se refiere.
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